domingo, 16 de enero de 2011

LUNES 29 DE NOVIEMBRE SEGUIMOS CON LAS VISITAS DE ALTURA Y COMPRAS EN EL GRAN MERCADO DE LAS IMITACIONES

Otro día más para levantarse temprano y es que hoy tocaba uno de esos días de los que tienes que hacer si o si....

que miedo da esa sonrisa el día de compras....


por lo que a primera hora tocaba coger fuerzas y desayunar abundantemente.


De vuelta a la zona de los grandes edificios donde la perla de oriente estaba omnipresente, realizamos la visita al edificio con el mirador más alto del mundo hasta la fecha y además había suerte porque el sol estaba fuera y podíamos disfrutar de buenas vistas.

Alvaro no dejó la cámara de video descansar....


El edificio visitado que en febrero del 2008 se comenzó a construir se trata de el segundo rascacielos más alto del mundo después del rascacielos Burj Dubai Khalifa.

Su nombre es Shanghai Center Tower y se trata de una construcción de más de 600 metros de altura y 127 pisos que, por supuesto, esta ubicado en el distrito financiero de Lujiazui  un área de Shanghai que dieciocho años atrás era tierra agrícola y eso demuestra de lo que está desarrollando el pueblo chino. El distrito está destinado a transformarse en el primer distrito de súper rascacielos de China y, en breve contará con un edificio que superará al de Dubai en una carrera por las alturas escalofriante.


El edificio es sin duda espectacular

Fueron muchos tramos de escaleras, ascensores todo supermoderno, con muchas luces que hacía parecer que estabamos en una nave espacial.

sube y baja con las niñas en brazos


Al final llegamos al mirador y pudimos disfrutar de las mejores vistas de la ciudad de Shanghai ya que ni el suelo te impide la vista ya que se trata de un suelo de cristal.....



La princesa Paula alucinaba con tantas cosas


ya en la salida nos preparamos para la siguiente visita....


Salimos de la visita con las imagenes de la ciudad en los ojos, en dirección a uno de los mercados de las imitaciones.... tremendamente grande y cansado, como ya nos imaginabamos había que regatear para todo ya que al tener aspecto de occidentales los precios eran estratosfericos, pero con la intención de empezar con el regateo. Los comerciantes son muy cansinos e insistentes y no dudan en seguirte por el mercado, pero que nadie se llame a engaños, la sensación es que todos los puestos que son pequeños, están conectados y son de los mismos dueños... si no lo tienen en 2 minutos lo tienes, juguetes, relojes, ropa, maletas, complementos, "seda", regalos....


En el mercado hay de todo pero mucho ojo con las tecnologias... no compramos nada

si quieres un reloj es casi tan facil como pedir arroz

hay de todo lo que pueda interesar...

Después de todo esto acabamos cansadísimos de tanto regatear, subir, bajar.... volvimos al hotel y después de hacer las compras en el supermercado a descansar.....

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